11.2.12

Las aventuras de Pinocho

Las aventuras de Pinocho fue publicada por fascículos en un periódico entre 1882 y 1883 y escrita por el italiano Carlo Collodi, fue ilustrada por Enrico Mazzanti y Carlo Chiostri. Se popularizó con la adaptación animada que realizó Walt Disney en 1940.
El Pinocho de Collodi comienza siendo más travieso y egoísta que su versión Disney. No cesan aquí sus diferencias con la historia conocida por todos, en la obra original encontramos escenas que por su crudeza fueron eliminadas de la cinta cinematográfica, así como detalles cambiados o matizados. Por tanto nos encontramos que la famosa ballena es en realidad un enorme tiburón y el Hada una suerte de madre que entra y sale de la vida de Pinocho pero siempre está presente de alguna forma.

  "- Hijo mío, las mentiras se descubren enseguida, porque hay de dos clases: hay mentiras que tienen las piernas muy cortas y mentiras que tienen la nariz muy larga. Las tuyas, por lo visto, son de la segunda clase."

Como de todo buen clásico podemos realizar varias lecturas diferentes del texto, en este caso destacan dos, una infantil con carácter altamente moralizante y una adulta predominantemente metafórica. Se estructura en capítulos muy cortos y dinámicos, que constituyen de por sí un relato completo con introducción-nudo-desenlace y que a su vez se engloban en el resto de la historia. Al inicio de cada uno de ellos encontramos un resumen de 2 o 3 líneas sobre lo que acontecerá en el mismo. En cada una de las aventuras Pinocho sabe que debe hacer algo, toma el camino equivocado, se arrepiente, aprende la lección y promete no volverlo a hacer.
Cabe destacar el papel secundario del Grillo Parlanchín, en la novela todos los personajes y situaciones tratan de instruir y guiar a Pinocho y no se centra todo en uno solo. La conciencia irá floreciendo en el protagonista con sus propios aprendizajes, por lo tanto no será un elemento externo y concreto.
"- ¡Pobre Pinocho! ¡Qué lástima me das!
- ¿Por qué te doy lástima?
- Porque sólo eres una marioneta... o peor todavía, porque tienes la cabeza de madera."
 En conclusión, estamos ante una novela recomendadísima que nos hace reflexionar sobre las marionetas, ya que no todas están hechas de madera...

6 comentarios:

  1. Reconozco que nunca me ha llamado la atención un cuento clásico como Pinocho. Sin embargo, sí me gustaría leerlo cuando sea el momento (leerlo a mis hijos, cuando los tenga, por ejemplo).
    Un beso.

    ResponderEliminar
  2. Ayy me encanta pinocho!! Jaja Yo tambien quiero leerselo a mis hijos *.* Mientras vienen se lo leere a mi perro ^^

    ResponderEliminar
  3. Pinocho nunca ha sido uno de mis favoritos, pero la parte adulta del libro me llama mucho la atención.
    Apuntado queda ^^
    1 besito!!

    ResponderEliminar
  4. Pinocho, un clásico. Pero aun así no se me había pasado por la cabeza que el cuento tuviera partes "fuertes" que debieran ser eliminadas. De todas maneras es un cuento muy bueno, que como tu haz dicho nos hace reflexionar sobre las personas.
    saludos :D

    ResponderEliminar
  5. ¡Oh! Pinocho es un clásico que a nadie le es indiferente, supongo que a muchos nos ha enseñado muchas cosas y la moraleja no escapa impune a ninguna conciencia.

    ResponderEliminar
  6. Nunca había pensado en leerlo pero después de esto tengo un poco de curiosidad por saber como es el libro ya que la película me encantó de pequeña.
    Un saludo ^^

    ResponderEliminar